Los Rockies están firmando una de las peores temporadas de la era moderna. Tras caer 21-0 ante los Padres, igualaron el arranque de 6-33 de los Orioles de 1988. Peor aún, su diferencial de carreras proyectado de -557 rompería todos los récords negativos desde 1900. El equipo está atrapado en una espiral que abarca el rendimiento, la gerencia, las lesiones y la falta de un plan de futuro.
La campaña 2025 de los Colorado Rockies está rompiendo récords... pero todos los equivocados. La humillante derrota por 21-0 ante los San Diego Padres este sábado en Coors Field no solo fue la peor del año: fue histórica.
Con ese resultado, Colorado cayó a 6-33, igualando la marca de los Baltimore Orioles de 1988 como el peor arranque en los primeros 39 juegos desde 1900. Ni siquiera los Chicago White Sox de 2024, que terminaron como el equipo con más derrotas en una temporada en la historia de MLB, comenzaron tan mal (ellos abrieron 11-28).
Una noche para el espanto
Desde el primer lanzamiento, el encuentro se salió de control. El novato Bradley Blalock fue masacrado en el montículo: 3.2 innings, 13 hits, 12 carreras limpias, 2 boletos, 1 ponche, 87 lanzamientos. Su efectividad ahora es 12.94 en cinco presentaciones.
El relevo Juan Mejía no pudo contener la hemorragia: permitió 7 carreras (4 limpias) en apenas 1.1 entradas. Entre ambos lanzadores, los Padres desataron una ofensiva despiadada, con 5 cuadrangulares incluidos.
Fernando Tatis Jr. lideró la fiesta con un jonrón de tres carreras. También conectaron vuelacercas Xander Bogaerts, Jake Cronenworth, Jason Heyward y Gavin Sheets. Todos ellos terminaron con 3 carreras impulsadas.
Pero el dato más demoledor lo firmó el abridor de San Diego, Stephen Kolek. El derecho lanzó una blanqueada de 9 entradas con solo 5 hits permitidos, convirtiéndose, según Opta Stats, en el primer lanzador desde 1889 (los Cincinnati Red Stockings) que lanza una blanqueada completa mientras su equipo anota 20 o más carreras.
Según MLB.com, el margen de victoria (21-0) empata con el tercer más amplio en una blanqueada desde 1900. Solo los Pittsburgh Pirates en 1975 (22-0 sobre los Chicago Cubs) y los Cleveland Indians en 2004 (22-0 sobre los New York Yankees) lo superan.
Una tendencia insostenible
Este descalabro no es un hecho aislado. En sus últimos seis juegos, los Rockies han permitido:
- 9 carreras (6 de mayo)
- 8 carreras (7 de mayo)
- 10 y 11 carreras en doble jornada (8 de mayo)
- 13 carreras (9 de mayo)
- 21 carreras (10 de mayo)
En solo nueve juegos en mayo, ya han permitido 85 carreras, más que las 83 que los Padres permitieron en todo abril.
Más aún: han perdido sus últimos 8 juegos, todos por al menos 8 carreras, algo que no se veía desde los Orioles de 2021. Su diferencial de carreras es -134, proyectado a terminar en -557, lo que lo convertiría en el peor de la era moderna:
Puesto | Equipo | Diferencial |
---|---|---|
1 | 2025 Rockies | -557 |
2 | 1932 Red Sox | -345 |
3 | 1932 Athletics | -344 |
4 | 2023 Athletics | -339 |
5 | 2003 Tigers | -337 |
Estamos hablando de un nivel de desastre sin precedentes modernos.
Una franquicia sin dirección clara
![]() |
El gerente general de los Colorado Rockies Bill Schmidt junto con el manager Bud Black |
“Creo que aún podemos revertir esto, pero tomará un esfuerzo colectivo”, dijo a The Denver Post.
“Sé que somos mejores de lo que hemos mostrado, pero ahora mismo no estamos bien. Hay que pelear y cruzar al otro lado”.
A pesar de los tres años consecutivos en el fondo del Oeste de la Liga Nacional y sin récord ganador desde 2018, Schmidt respalda al manager Bud Black:
“Los jugadores trabajan duro y llegan con energía. No creo que estemos en el punto de cambiar de manager. Todavía creen en lo que estamos haciendo”.
Sin embargo, la situación estructural del club es tan crítica como lo que se ve en el terreno:
- El sistema de ligas menores está clasificado 18º por MLB Pipeline.
- El único top 5 prospect con ETA para este año es Chase Dollander, quien ya está en el equipo... con 7.71 de ERA.
- El contrato más caro de la franquicia, Kris Bryant, es una sombra de sí mismo: padece una enfermedad degenerativa en la espalda, ha ido 9 veces a la lista de lesionados desde 2022 y no ha tenido un OPS+ superior a la media en tres años.
Un futuro sin respuestas
Los Rockies están atrapados en una tormenta perfecta: talento limitado, lesiones, falta de dirección, decisiones contractuales cuestionables y una cultura de complacencia. Mientras otros equipos, incluso en reconstrucción, buscan formas de competir o acumular activos, Colorado parece simplemente existir... sin rumbo.
El veterano Kyle Freeland, nacido en Denver y símbolo del equipo, casi rompe en llanto al hablar del estado actual del club. Esa imagen lo resume todo: hay desesperación, pero no hay solución a la vista.
Y es que seguir a los Rockies en 2025 no es solo doloroso. Es un acto de resistencia.
Y ni siquiera sabemos si valdrá la pena.
Comentarios
Publicar un comentario